Quién soy

"Soy Juana Dangl, una patagónica de alma "patiperra", cartel que portamos los chilenos.
La que disfruta de este amado pizarrón cordobés, y que dibuja al corazón, sin quebrar la tiza de los sentimientos"

viernes, 20 de mayo de 2011

Anita de La Calera

  Macizo jazminero,
lluvia de estrellas,
noche de palabras.
Sahumerio ceremonioso,
discreto vestigio
que atesora La Casona.


El amor allí desborda.
Sus voces niñas
se abren en el aire:
perfectas y frescas,
juguetean sin alardes.


Aquellos pétalos de luz
perfumando poesía
vinieron tras de mí.
Souvenir...
lo guardaré por siempre
entre las hojas
que conserva la memoria.

Anita es el nombre que ostenta en su frente la casona colonial  construida en 1812.  En La Calera, Sierras de Córdoba, Argentina.

Hermano Coigüe

Amigo corazón verde
naciste a contramano
entre carmín de cortezas.

Tu alma vegetal es mía
aunque tu vida es ajena,
tú para mí eres regreso
para tu dueño: madera.
Vives
del antojo de mi tierra.
Eres tamiz de aguaceros
y yo, tu hermana de savia,
soy astilla viajera
¡sangro verdor en el alma!

    Camino a Aysen:
busco tus ojos, tus ramas,
tras el cercado – solito -
parece que me esperaras.
Por eso ansío tus brazos
que no saben de contactos
ni de versos, ni de amor,
ni de añoranzas del pago.

Tu figura arborecida
se confunde con mis tintes.
Tú en medio del camino
¿Y yo…?
              ¡Sin poder volver!

Juana Dangl - 2003

Perlas del sur


Patagonia, sol y agua,
arcón de la Humanidad,
con ballenas y petróleo
y esa flor: Namuncurá.

Patagonia, van conmigo
tus mesetas arcillosas,
sus mamelucos al viento
y ostiones-secos-de mar.

Sarmiento, en su Red Verde
va, a la sed de Comodoro
y norte de Santa Cruz.

Sarmiento está orgulloso
del "Bosque petrificado"
y de la sangre negruzca
bajo el dormido "Dragón".

    Patagonia,
lazo de unión en las manos
nativas e inmigrantes
en centenario progreso.

Patagonia, sol y agua,
arcón de la Humanidad.




                                                       Ceferino Namuncurá, Santo originario de la Patagonia

sábado, 30 de abril de 2011

CALETA OLIVIA Y EL MAR





¡OH!...mar
de Caleta Olivia,
estoy acumulándote
en mis ojos.
Serás mi escarapela del sur
¡he de llevarte prendida!
Después te pensaré
vestida en vidrios rotos
por el sol de la mañana;
más tarde
sobre tu espalda
un mantón de fino viento
tejido por los recuerdos...


Mi silencio traerá
aquel rumor quejumbroso
de mareas guitarreras
en noches de plenilunio.
Y si en un amanecer
ven rodar por mi rostro
¿algunas perlas?...
   ¡es que a veces
         el mar
             se me escapa!


                                      Juana Dangl

Imagen de la Web

jueves, 21 de abril de 2011

De Punta Arenas a Uruguay

De Punta Arenas a Uruguay




Papá, puntal de mis tiempos
llevo la heredad del nido,
aromas y sabores mixturados,
bronce, relojes, pan casero
y frambuesas y calafates
y el árbol de Navidad.

Padre, vuelvo de Montevideo,
de aquel puerto donde un día
llegaron los Vitrac-Castagnet,
con  Francia en el equipaje
y en su corazón grabados
el Sena y Notre Dame.

Al cruzar el “Entrevero”
vi a la pequeña Francisca
jugando por esa Plaza…
Y guardo la bendición diaria
de la antigua Iglesia Matriz.
Allí, vive amarillento
el natalicio que reza:
Francisca Vitrac-Castagnet

Y oré por ti y tus ancestros
y no fui a la “ Messe du Dimanche”
por estar en Canelones,
en Atlántica, en Las Piedras
y Cerrillos y Progreso.

Tu  alma de reloj me ha llevado
del campanario de Punta Arenas
a su gemelo en Las Piedras,
Chile y Uruguay, las mismas “ruedas”
dos Catedrales, un Cielo.




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