Macizo jazminero,
lluvia de estrellas,
noche de palabras.
Sahumerio ceremonioso,
discreto vestigio
que atesora La Casona.
El amor allí desborda.
Sus voces niñas
se abren en el aire:
perfectas y frescas,
juguetean sin alardes.
Aquellos pétalos de luz
perfumando poesía
vinieron tras de mí.
Souvenir...
lo guardaré por siempre
entre las hojas
que conserva la memoria.
Anita es el nombre que ostenta en su frente la casona colonial construida en 1812. En La Calera, Sierras de Córdoba, Argentina.
Querida amiga:
ResponderEliminarHoy me llegan noticias de este hermoso blog.
Con el nombre tan poético como musical de tu querido terruño.
Reconozco en tus versos tu alegría, tu sonrisa, el corazón abierto como tu mano y esa vocación irrenunciable de huella y de siembra.
Juana: Tengo el honor de ser el primero de tus seguidores. Te deseo lo mejor. Y que pronto recobres tu salud plena.
Un abrazo y un beso.
Querida amiga, es mi deseo que tengas muchas visitas en este espacio donde se abre tu corazón de poeta! Abrazo
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